La voluntad del pueblo

El autor comenta que "lo único que espera el General Obregón para decidirse a ser candidato, es que la mayoría de los mexicanos apoyen su candidatura". Entonces puede considerarse como el sucesor del presidente Calles, solo hay que quitar del camino a los pocos antireelecionistas y al general Gómez, quien también aspira a ser candidato, y el resto de la sociedad esta deseosa de que Obregón vuelva la poder. Los diputados justifican las reformas constitucionles para que Obregón pudiera ser candidato, diciendo que es la voluntad de la mayoría del pueblo fue la que inclinó su decisión en favor de la aprobación de las reformas. El autor se sorprende de la influencia que tiene la voluntad popular en las decisiones legislativas. Como los diputados son los interpretes de la voluntad nacional, quien garantiza que el pueblo no quiera nombrar presiente a Obregón sin necesidad de elecciones sólo para asegurar el triunfo. Explica que no es válido que las leyes se cambien solo por gusto o conveniencia de quien las aplica, así como se respeta al hombre prodigio también deberia tenerse el mismo respeto por las leyes