Un hombre más en el martirologio revolucionario.

Opinión del diario (se inserta fotografía de Obregón) sobre los acontecimientos y la política mexicanos en términos favorables al gobierno y a la permanencia de Calles en la presidencia, inclusive desechando la posible culpa de Morones y la CROM: `.... Sin necesidad de distraer energías en combatir a sus enemigos naturales, la revolución mejicana, que ha dado un avance gigantesco en los ocho años que Obregón y Calles han llevado su timón, podría haber acabado de estabilizar sus conquistas. Obregón era el más indicado para ello. Hombre de armas accidentalmente -sin el cobarde asesinato de Madero tal vez no hubiera abandonado nunca su condición civil-, reunía en sí al caudillo experto y valeroso, al gobernante sereno y tenaz,.... La oposición laborista había venido a quebrar la unidad del bloque revolucionario. Pero entre la Confederación obrera mejicana y Obregón no podían existir hondas discrepancias ideológicas.... La separación de Marones [sic] del gobierno Calles, en el que había ocupado el mismo lugar preferente que Vasconcelos en el de Obregón, no podía basarse más que en el momentáneo enojo del líder de la CROM por unas frases excesivamente vivas pronunciadas por el ex presidente de la República en los postres de un banquete preelectoral. Nada que pudiera justificar un rompimiento definitivo, y menos la premeditación de un asesinato.... Los obregonistas -que hubieran sido los primeros en recelar de existir el más leve motivo- piden a Calles que continúe en el Poder. Nada cambiará esencialmente en Méjico en ese caso. Un nuevo nombre en el martirologio de la revolución. Y otro periodo presidencial de Calles, 'político -según su autodefinición- de fe y hombría', que, obligado por las circunstancias, reforzará y afilará las armas defensivas -nunca vencidas en sus manos- de la revolución.` (documento fuente). En esa misma página, una caricatura que ilustra a una secretaria con su jefe: `Por si acaso...: (El asesino de Obregón se hizo pasar por caricaturista. De la.